Los PPA como aliados de las empresas
La puja de los PPA (Power Purchase Agreement) es un mecanismo utilizado en España para la contratación de energía renovable a largo plazo. Los PPA son acuerdos entre empresas generadoras de energía renovable y compradores de energía, donde se establece un precio fijo por la energía generada durante un período de tiempo determinado.
En la puja de los PPA, los compradores de energía, que suelen ser grandes consumidores como empresas o instituciones públicas, compiten por contratar la energía generada por las plantas renovables participantes en la subasta. La subasta se realiza mediante un sistema de puja descendente, donde los ofertantes van reduciendo el precio al que están dispuestos a comprar la energía hasta que se alcanza un acuerdo.
Aunque parezca raro que en las subastas de PPA los compradores compitan por contratar la energía renovable al precio más bajo posible, los precios no suelen caer por debajo del costo de producción de la energía renovable, ya que las empresas generadoras no estarían dispuestas a vender su energía a un precio que no les permita obtener ganancias y financiar sus proyectos. Además, el precio que se establece en el PPA no solo cubre el costo de producción de la energía, sino también otros gastos asociados a la generación de energía renovable, como la inversión en infraestructuras, el mantenimiento de las plantas y la gestión de los permisos y autorizaciones necesarios para su operación. Por lo tanto, aunque los precios pueden ser competitivos, las empresas generadoras aseguran que el precio fijado en el PPA cubra los costos y les permita obtener una rentabilidad adecuada para sus proyectos.
La puja de los PPA es una forma de fomentar la inversión en energías renovables y de asegurar un precio estable para la energía generada, lo que a su vez permite a las empresas generadoras obtener financiamiento a largo plazo para sus proyectos.
En España, Iberdrola, Endesa, Acciona, Grenergy, Greenalia, Qualitas Energy, Statkraft, Alcoa, Amazon y El Corte Inglés, entre otros grupos, están protagonizando gigantescos contratos de suministro de luz a largo plazo. Del total de megavatios en PPA que se firmaron en Europa el pasado año, casi la mitad se firmaron en España, lo que nos convierte en un caso único en la UE. Y no es solo un tema de número de empresas, sino también de volumen de contratación.
La carrera, que ya empezó hace tiempo, se ha acelerado al máximo ahora, porque los grandes consumidores de electricidad han visto en los PPA una forma de protegerse de la volatilidad de precios que está sufriendo la luz a raíz de la guerra de Rusia contra Ucrania. España ya empezó a despuntar en el mundo de los PPA hace cuatro años, pero ahora su dominio es absoluto y los récord se suceden mes a mes.
Además de protegerse contra la volatilidad de los precios, otro denominador común de los PPA es el reclamo de las renovables como pilar para la descarbonización de las empresas. La transición hacia una economía baja en carbono es uno de los mayores desafíos globales de nuestro tiempo. Las empresas son cada vez más conscientes de la necesidad de reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero para hacer frente a la crisis climática y cumplir con los objetivos establecidos en el Acuerdo de París. Los PPA se han convertido en una herramienta popular para que las empresas reduzcan su huella de carbono y muestren su compromiso con la sostenibilidad. Al invertir en energías renovables, las empresas pueden reducir significativamente sus emisiones de gases de efecto invernadero y cumplir con sus objetivos de sostenibilidad. El reclamo de las renovables como pilar para la descarbonización de las empresas es una forma de mostrar su compromiso con la sostenibilidad y reducir su impacto en el medio ambiente.