Por qué nos encanta que haya viento

 

En general, el precio de la energía eléctrica se determina en función de la oferta y la demanda, así como de otros factores como los costos de producción y distribución de la energía. Si hay suficiente energía disponible y la demanda es baja, es posible que el precio de la energía disminuya. El viento es una fuente de energía renovable y limpia, por lo que, si hay una fuerte brisa, es posible que haya más energía disponible y, por lo tanto, una disminución en el precio de la energía eléctrica.

La intensidad y la dirección del viento pueden variar mucho en función de la ubicación geográfica, la época del año y otros factores. En general, en España los meses de más viento coinciden con la temporada de invierno y el principio de la primavera, momentos en los que el precio del mercado es más bajo que en los meses de verano-otoño, cuando sopla menos el viento.

Si lo piensas, todos nos beneficiamos de aquellas regiones donde hay vientos más fuertes porque el precio de la energía eléctrica en España es el mismo en todo el país. El precio de la energía eléctrica se determina mediante un sistema de subastas en el que participan todas las empresas eléctricas del país. El precio resultante de estas subastas es el precio al que se vende la energía a los consumidores en todo el país, no por regiones.

Según la Asociación Empresarial Eólica, para un consumidor medio con Tarifa AT1 y un consumo de 1.500 MWh anuales, el ahorro a lo largo de 2020 ha sido de 7.886€.

En Raven, en nuestros modelos de predicción de producción de energía eólica, se tienen en cuenta estos posibles incrementos en la cantidad de viento, lo que ayuda a que nuestras predicciones funciones muy bien

En fin, que ese refrán que dice “amor y viento, por uno que se va vienen ciento” bien podrá ser cierto… al menos en lo referente al viento.